Opinión Vuelva usted mañana

Tsevan Rabtan: Shangri-La

Dedicado a Manuel de Lorenzo,
que ha inspirado este artículo

Hace ya tiempo que se va desvelando, merced a estudios rigurosos y valientes, que la cultura catalana ha sido objeto de una forma de persecución mucho más insidiosa y sutil que la tradicional, sobre la que nada diré por obvia. Se trata del “borrado” sistemático de la filiación catalana de ciertas obras y hechos notorios. Así, al igual que hace unas décadas descubrimos que Beethoven formaba parte de las “gentes de la melanina” —usando esta feliz expresión acuñada hace poco por afroamericanos—, se ha ocultado que Colón era de nacionalidad catalana o que el Quijote había sido escrito originalmente en catalán y Cervantes, todo lo más, fue un traductor de esta obra germinal del género novelístico. ¿Qué hay detrás de estas maniobras? Es evidente. Ayer, Artur Mas, en misiva dirigida a David Cameron, el primer ministro del Reino Unido, dejaba constancia de un hecho indiscutible: los ejemplos más antiguos de parlamentarismo europeo se encuentran en Cataluña e Inglaterra; podría haber añadido que también se encuentran en Inglaterra y Cataluña el nacimiento y, a la vez, la culminación del drama y la novela modernos. Podría, de no haber sido por esa constante apropiación por el expansivo y violento centralismo castellano —con la complicidad de las grandes potencias—, de todos los logros de las culturas periféricas.

Yo quiero seguir esa senda de denuncia. Si el Estado español, en toda su “multiformidad”, es viable, ha de serlo desde la verdad y la balanza. Hablemos de Francesc Cabra.

Francesc Cabra nació en 1897 en Girona, en el seno de una industriosa familia de comerciantes. Desde muy niño se vio atraído por las maravillas del cinematógrafo y comenzó a producir pequeños cortos (aclaro que se trata de cortos pequeños considerando el hecho de que los cortos suelen, por definición, tener escasa duración) en los que lo ayudaba, cantando y tocando instrumentos diversos, un joven y dotado amigo de vecindad, llamado Xavier Cugat.

En la convulsa sociedad catalana de principios del siglo XX, el joven Francesc fue adquiriendo una conciencia social muy acusada, que le llevó a dirigir numerosas obras de denuncia, en las que latían permanentemente los tradicionales optimismo y solidaridad propios del pueblo catalán. Esas obras, hoy perdidas, tuvieron un éxito considerable, sobre todo en los vigorosos núcleos urbanos catalanes, y Cabra comenzó a ser visto como un peligro para el establishment, sobre todo por el trazo duro con el que el cineasta dibujaba el expolio que sufría el pueblo de Cataluña por parte del Estado español. Así, a mediados de la década de los treinta, Francesc Cabra filmaría la que muchos consideran su obra maestra, Que bonic que és viure, una obra audaz, que a primera vista podía parecer un simple cuento para niños, pero que adquiría, en sus momentos más lúgubres, el formato del cuento gótico, con gruesos y negros trazos al modo de Goya —del que también habrá que hablar en su momento—.

Que bonic que és viure es, en síntesis, una alegoría sobre la explotación del honrado e industrioso pueblo trabajador por las élites extranjeras, con la complicidad de algunos traidores. Como verán, el argumento es absolutamente actual; solo hagan el ejercicio mental de sustituir algún nombre por otro. Su protagonista, Jordi Mur, es un hombre repleto de ideales que se ve abocado a dar un paso al frente para detener al malvado banquero Puertas, que intenta hacerse con la pequeña casa de empréstitos de una localidad imaginaria, llamada Sitges, situada en algún lugar de la Cataluña rural. Cuando Puertas, del que no se dice origen, aunque este es fácilmente deducible por su marcado acento, se aprovecha de la buena fe de Mur para provocar, un once de septiembre, la bancarrota de la casa de empréstitos, el bueno de Jordi intenta suicidarse. Lo salva un bondadoso ángel, que le muestra qué habría sido de su ciudad si él no hubiera nacido. Así, el honrado protagonista recorre una ciudad fantasmagórica, ahora rebautizada como santo Domingo de Silos, en las que sobresale, ominosa, una abadía gigantesca con enormes cipreses, y en la que todos los nombres de las calles están escritos en español. Intenta hablar en catalán con los niños que encuentra por la calle y es respondido en castellano, con burlas hirientes, y observa chiringuitos en los que huele a pescado y estatuillas de toros o bailarinas flamencas y gente que baila apretando sus cuerpos de manera lúbrica. Corre desesperado por una calle gris, camino de su casa, en busca de su esposa, y se encuentra con una solterona avejentada y gris, que sale de la Biblioteca municipal Pedro Gimferrer y que huye cuando él la aborda de forma apasionada hablándola en catalán. El cuento tiene un final feliz: repentinamente, Jordi Mur se ve en su pueblo de siempre, oye las voces de siempre, la de sus amigos y vecinos, y descubre que toda la comunidad, incluso los funcionarios que debían arrestarlo, ha reunido los ahorros de toda una vida para evitar que Puertas se haga con el control de la ciudad. Al final todos entonan entre lloros de alegría y caras de felicidad, el rossinyol.

Esta obra no pasó desapercibida. El Gobierno de la época impidió su estreno e intentó secuestrar todas las copias. Algunas de ellas circularon de forma clandestina y la leyenda de Francesc Cabra se fue agrandando. Sin embargo, a la vez que se agrandaba su leyenda, las penalidades que comenzó a sufrir fueron espeluznantes: recibía llamadas a medianoche en las que voces anónimas le preguntaban por sus primos de Cuenca —primos inexistentes—, se producían misteriosos desabastecimientos de crestes en la pastelería de debajo de su casa, o recibía codazos con demasiada frecuencia al subir a los tranvías, por citar algunas.

Es comprensible que, cuando recibió la llamada de su viejo amigo Xavier Cugat, que había emigrado de niño a Cuba y logrado, más tarde, el éxito en Hollywood, decidiese emigrar a Estados Unidos, para poder trabajar libremente. Por desgracia, su salida no fue sencilla. Tuvo que entregar todos los rollos de sus películas, renunciando a su obra. Y tuvo, además, como consecuencia de un repugnante pacto entre la República española y el Gobierno estadounidense, que renunciar también a su biografía. Así, obligado a escoger, decidió inventarse un falso nacimiento en Sicilia y una emigración temprana a California.

Frank Capra, así rebautizado, hizo un remake de su obra maestra en 1946. Siempre respetó los términos del acuerdo, gracias al cual pudo adquirir la nacionalidad estadounidense, pero los que tienen ojos para ver, comprendieron la verdad, cuando nos mostró, una vez más, su país natal, en una de sus obras más evocadoras y hermosas, la primera que rodó en Estados Unidos: Lost horizon.

Francesc Cabra murió en 1991. No pudo, en vida, cumplir su sueño de regresar a una patria libre de opresión.

 

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42 Comentarios

  1. Sencillamente brutal.

  2. Im-Impre-Impresionate !!!

  3. chirimoya

    insensato! que se lo van a creer! que les da igual la realidad.

  4. Está muy bien, aunque has creado un nuevo agravio y motivo de reivindicación con el que nos darán la brasa dentro de varias décadas.

  5. si non e vero, e ben trovato ;-)

  6. Es intolerable que se siembren estos vientos con la que está cayendo. No acostumbro a acusar sin estar completamente seguro, pero por momentos parece que el autor incluso se inventa algunos datos. A veces, en frases como «…una localidad imaginaria, llamada Sitges, situada en algún lugar de la Cataluña rural» tiene uno la impresión de que el texto podría ser sarcástico y todo. Si el artículo es de coña, debería marcar más la ironía, porque uno es muy perspicaz (a mí, normalmente, no se me escapa una) y en este caso no queda claro. ¿Está usted seguro de que Capra es catalán, señor Rabtan?

  7. Sí, sí, sí. Lo que usted quiera. Los catalanes somos un atajo de conspiranoicos desquiciados.

    Pero Colón era catalán.

  8. Alejandro

    Jamás me habían llamado Nazi de una manera tan sutil. Como si te lamieran los huevos mientras te penetran analmente con un dildo de 25 cm.

  9. Pero eso solamente es porque jamás se había sido Nazi de una manera tan sutil. O no se había puesto en evidencia.

  10. Apa, pues yo sabía lo de Josep Barberà, el creador de Tom y Jerry. Y también lo de Anaïs Nin. Y que el grog de los marineros viene del «groc» catalán. Incluso había oído la teoría de que Gibraltar es español, y Séneca cordobés. Pero eso de Francesc Cabra, pues no, la verdad.

  11. Catalunya Lliure!!! (por lo menos fiscalmente)

  12. Fulgencio Barrado

    Creo que en opinión de algunos separatistas, no es que los que mentas fueran catalanes sino que todos los catalanes son los que mentas…, supongo que reencarnados.
    Estaría bien un artículo sobre la famosa «preguntita» que preparan para el referendum; creo que es «¿quiere que cataluña sea un estado integrado en la UE?». Y es que creo que deberían definir un poco más y preguntar, por ejemplo: ¿quieren que Cataluña sea un estado con una renta per capital de 100.000 euros anuales, con una sanidad universal con listas de espera de menos de 2 horas, con comedores gratuitos, escuelas públicas de primera nivel…, y dos huevos duros?.
    En todo esto el problema es que el tiro siempre parece que va para todos los catalanes, y creo que no es así, ni siquiera para todos los catalanes independentistas, sino más bien para los que defienden la secesión con argumentos falaces y señalando a España como el origen de todos su males.

  13. Ti manca finezza Tsevan. Debe ser la ironia del letrado, un poco pobre.

  14. Tony RIbas

    Vaya, Tsevan ha hecho un Reverte. Parece ser que está de moda, no es el único últimamente, y en esta revista ya es el segundo.

    Para el que no lo sepa, «hacer un Reverte» (lo lleva haciendo Reverte en el twitter los dos últimos domingos seguidos) es decir o escribir algo sobre un tema polémico a propósito para que algunos lo entiendan por donde no es, y reírse de los, según ellos, «idiotas» que entran al trapo, que se descalifican solos —según los «listos», claro—.

    En fin, tanto a los unos como a otros, idiotas y listos, les dedico esto:

    http://i.minus.com/i89PT7QrvN3iu.jpg

    • Tsevan Rabtan

      Es curioso. Me sorprendió mucho que alguien creyera que el señor de Lorenzo iba en serio. Y me asombraría que alguien creyera esta historia. Si se fija no creo que nadie haya pensado que fuera cierta. Así que le falla el presupuesto de su tesis. Mi intención en realidad es cristalina y obvia: descojonarme de ciertos planteamientos. Y creo que hay gente molesta, pero porque esos planteamientos les molan. Y como soy muy comprensivo también comprendo las maniobras de distracción.

  15. A pesar de lo que diga David Cameron, creo que el primer parlamento europeo se creó en Islandia:

    http://es.wikipedia.org/wiki/Al%C3%BEingi

  16. Chapó, don Tsevan. Non li manca finezza.

    Más allá de nacionalismos y los subsiguientes debates ideológicos de unos y otros, hay pocas cosas tan divertidas como escuchar las teorías que apoyan el que Cervantes escribiera el Quijote en catalán.

    http://www.youtube.com/watch?v=SYnScRSRphQ

  17. Una lectura divertida si señor!

    Estridencias, de todas formas, hay en todas partes. Yo todavía me río cuando pienso en las declaraciones de nuestra querida Esperanza Aguirre, asegurando que España lleva siendo así desde hace 3000 años.

    Creo que el tema de la independencia se tiene que llevar de una forma algo mas madura de la que estamos acostumbrados en este país. Un punto de madurez es, ciertamente, reírse de los extremos (y si es con cierta «gracia» literaria, mejor mejor).

    Felicidades por el artículo.

    P.D.: Muy grande el calificativo «hacer un Reverte»

  18. Esperanza Aguirre tiene un listón muy alto con respecto a sí misma y lo increíble es que siempre consigue superarse. Si hubiera nacido en Cataluña no me cabe ninguna duda de que sería la primera independentista. Tampoco la tengo con respecto a Mas de haber nacido en Castilla León. En lo que a recortes en Sanidad y Educación se refiere, se entenderían a las mil maravillas. Cada uno con su estilo son muy buenos en lo que a cortinas de humo se refiere. Lo dicho que, muy a pesar de los Mas y las Aguirres, el Homo Antecessor de Atapuerca no portaba banderas.

  19. Muy divertido el artículo. No quiero, por otra parte, dejar de mencionar que sobre Cervantes sí que hay ciertas pistas que apuntan a posibles orígenes Gallegos, Leoneses o Zamoranos, ya que hasta sus apellidos lo son, y su famoso protector fue Lemos.

  20. Una auténtica vergüenza su manera de menospreciar la cultura catalana pervirtiendo su idosincrasia y rebajándola hasta límtes inauditos de ridiculez. Me ha encantado.

  21. Mr Tse, creo que debería mandar la versión catalana de este espectacular descubrimiento a http://www.inh.cat/. Se lo publicaban fijo. Frank Capra catalán. ¡Qué inicua esla manipulación histórica castellana! A ver si continúa en esta fértil veta y nos descubre nuevos hijos de tan gran nació, que todos lo esperamos ansiosos.

  22. Ahora ya sin ironías: ¿alguien ha visto en detalle ese sitio? ¿Puede existir una instituciòn así? ¿De verdad se subvencionan cosas como el Institut Nova història con dineros de nuestros impuestos? ¿Puede pretenderse seriedad en un sitio cuyos artículos son como el que acabamos de leer, pero sin asomo de ironía?

    Vamos: lo que quiero preguntar, dicho en plata, es: ¿SE PUEDE SER MÁS CATETO?

  23. Grunentahl

    Si,si, se empieza con ese ironiasmo o sarcasía y se acaba creando memoria histórica. ¿No era catalana Rita Hayworth, que tuvo que ver con Xavier Cugat?
    Me encantaría ver la única copia de la peli de Francesc, que seguro que está guardada en la Cinemateca de la Generalitat…

  24. siperòno

    Y hay que añadir que como protesta ante el yugo opresor castellano, Tricicle no utiliza lenguaje hablado en sus espectáculos. Tras la independencia sus obras serán de lo más locuaces. La primera será un musical.

  25. Pingback: Jot Down Cultural Magazine | El yermo

  26. Pingback: El Yermo (Cristian Campos) « Arabatik

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  28. Acabo de ver el vídeo en el que dicen que Cervantes era Sirvent y el Quijote se escribió en catalán. No sé si es más delirante que ridículo. Y luego dicen que no les tomamos en serio (recuerdo cuando Pujol, con motivo del 400 aniversario del Quijote, dijo despreciativo que no le interesaba, que no tenía nada que ver con la cultura catalana).

  29. Estaba pasando la tarde del sábado, chafardeando en Internet. Concretamente, estaba buscando alguna referencia que relacionara el nombre de Jordi Bilbeny con algún tipo de enfermedad mental. Y mira por donde que por obra y gracia de Google he caído aquí. Le felicito por el articulo . Está tan bien estructurado que he tenido que ir a la wikipedia a leerme la biografía de Frank Capra. No obstante después de leer algunas de las investigaciones del tal Bilbeny y sus secuaces. Uno ya no se extraña de nada y hasta te vuelves más receptivo a cualquier cuento chino . Un saludo y gracias por su genial sentido del humor. Me voy a echar unas cañas que esta noche echaremos unas risas con esta historia.

  30. Jordi Centelles

    Sr. Rabtan, tot això està molt bé, però i les proves, on són? Calen proves per convèncer els descreguts i els escèptics.

  31. P. Vilardebò

    Como cuento está bien, pero así como en el caso de Colón hay pruebas de su catalanidad, y en el del Quijote sospechas (¿como un autor de Alcalá de Henares podria utilitzar tantos catalanismos, sino?), en el caso de F. Capra, la cosa da risa, porque Capra ya estudió en EEUU y en el año 1926 ya filmó el filme «El forzudo» en América. ¿Como podia filmar peliculas en Catalunya en los años 30 si vivia en Estados Unidos? Y otra incongruencia, ¿como podia ser amigo de Xavier Cugat, si la familia de Cugat ya emigró a Cuba el 1903? En fin…. no mezclemos hechos historicos manipulados com bromitas sin sentido, por favor. Más seriedad.

  32. Nicolau Queig

    Que desesperados que os mostráis todos estos pseudo-caudillos catalanofóbicos…

    De tanto violar a la gallina se os ha roto y ahora estáis en la fase post shock dándo pataletas y intentado convenceros que no necesitáis la gallina de los huevos de oro…

    Seguís el mismo patrón de comportamiento de los maltratadores de mujeres cuando esta finalmente da portazo.

    Ya podéis ridiculizar todo lo que queráis, que nos quedan cuatro días de secuestro y todavía no habéis aprendido a guisar…

  33. P. Vilardebò

    El odio antictalán es secular y enfermizo. Los españoles deberian preguntarse por qué Cataluña es un problema para ellos. La respuesta la tengo clara: después de siglos, que Cataluña sea hoy en día lo que es y no una provincia asimilada como Aragón, por ejemplo, es una muestra de su fracaso colonizador. Con los catalanes España ha fracasado, porqué no ha conseguido convertirles en buenos españoles que solo conserven de su pasado catalán ese acento abierto y el interés por a sardana y los castellers. No, en pleno siglo 21 i después de varias guerras, dictaduras y represiones varias, resulta que el pueblo catalán sigue votando en las urnas opciones catalanistas-independentistas, sale a la calle a pedir ser un nuevo estado en Europa y se empeñan en querer conservar su idioma y su identidad (¡tienen televisiones, radios, periodicos, libros en catalán!). ¿Incréible, verdad? Con lo orgullosos que están los españoles de ser una nación de 3000 años de historia (Esperanza dixit), y esos catalanes no quieren serlo, no quieren asimilarse… ¿Y por qué, se preguntan incrédulos algunas mentes pensantes españoleras?
    Respuesta fácil: ser español no es ningún orgullo, para los que no lo son. Y si no, que se lo pregunten a los gibraltareños, a ver si son ¨(o se consideran o quieren ser) españoles.

Responder a Charlie Cancel

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