Félix de Azúa: Dios nos libre de los libros
La maldita crisis ha atrapado con su garra de hielo a un amigo mío que ha dedicado su vida entera a la literatura, quiero decir que la ha sacrificado como antes se hacía cuando de verdad te empleabas en hacer algo serio. Ahora, con más de sesenta años, se ve obligado a restringir unos gastos que nunca fueron exagerados. Su […]