Celulitis mon amour
A Dave Cooper se le vendía en su momento con una premisa: «Se atreve a afrontar sus inquietudes más socialmente inaceptables». Estaba en la línea de Crumb, Clowes, Matt o Burns y, por supuesto, la de sus compatriotas canadienses Chester Brown y Seth. En el caso de Flujo, reeditada por La Cúpula, lo socialmente inaceptable era el extraño romance entre […]