Odio prusiano
La gran fuerza o, si se prefiere, la gran debilidad del doctor Tarrasch reside en su pronunciado amor propio. Sin ello, habría sido un muy mediocre jugador de ajedrez; teniéndolo en un grado anormal, se ha convertido en un gigante. Así hablaba el futuro campeón mundial de ajedrez, Emanuel Lasker, sobre su compatriota Siegbert Tarrasch a finales del siglo XIX; […]