Cometerás actos impuros
Veneri servit amica manus Ya reinaba Nerón cuando se hizo necesario que la humanidad recordara algo que, en el fondo, no había olvidado del todo: «Tu mano sirve como dueña de tu placer», escribió Marcial. De la fortuna que supone que, como especie, vengamos ya equipados con un mecanismo de placer autosuficiente, se había percatado hasta Diógenes: «¡Ojalá, frotándome el […]