Jot Down News

Jot Down News #18

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The Shining, 1980. Imagen: Warner Bros.

Los comentarios de lectores comunes a obras maestras pueden ser desternillantes, la pereza es la materia prima de todos los vicios, si no lees no aprendes, y si no aprendes no evolucionas. En este Jot Down News #18 te contamos lo anterior y mucho más, resumen de nuestra revista sección por sección y artículo por artículo para que no te pierdas nada.

Literatura

La escritora Sara Mesa, Un amor, Cara de Pan, Cicatriz, Mala Letra, nos explica cómo la crítica literaria ya no la ejercen unos cuantos popes o académicos, sino bloggers, booktubers, y por encima de todos, Goodreads, la red de redes para el intercambio de opiniones y críticas sobre libros. Allí hay de todo, comentarios razonables, buenas críticas, negativas, y directamente delirantes. Especialmente dirigidas a títulos reconocidos como clásicos de la literatura universal. «Goodreads: puntúe este artículo del uno al cinco».

Sociedad

Entren a conocer por dentro cómo es el trabajo de un redactor de Jot Down, Diego Cuevas ha estado aquí desde el origen de la revista, y el estilo de su firma es inconfundible. En esta rememoración y narrativa de la experiencia propia, que incluye una silla de trece mil euros, recopila además aquellos nombres de éxito que hoy recordamos asociados a comenzar en un garaje, pues aquí más o menos. Son las «Memorias de un redactor en pijama».  

Entrevistas

Se marchó para seguir entrenando en China con un legado muy meritorio, títulos en tres campeonatos americanos, una premier y llevar al Villarreal y al Málaga a los mejores registros de su historia. Decidió volver para entrenar al Real Betis, al que acaba de ganar la Copa del Rey. En esta entrevista regresamos a un encuentro que tuvimos con él hace casi diez años, en 2013, en Málaga, cuando aún estaba caliente su paso por el Real Madrid. Hombre de palabra, pero también de obra, que para él consiste en formarse y trabajar e ir con la verdad y la ética por delante. Tiene un lugar reservado entre los grandes de los banquillos de todos los tiempos y, volver ahora a aquel encuentro, en el que habló de sus orígenes y sus aficiones, merece la pena. «Manuel Pellegrini: «Los gobiernos, democracias o dictaduras, cuando hay crisis, se amparan en el fútbol». Por Álvaro Corazón Rural. Fotografía José Antonio Ramos.

Fotografía

Mostramos una parte de la colección de fotografías de Jose Conceptes, fruto de la búsqueda de misterios insondables en una arquitectura espacial y, sobre todo, sensorial. Su totalidad puede encontrarse en papel, publicado en nuestra trimestral Jot Down nº37 especial círculos polares.

Música

Los 35 minutos, 27 segundos, de un vídeo de YouTube donde se presenta al músico como el mayor arquitecto del jazz moderno, permiten comprender la fascinación que aún rodea a esta figura de la música. Algunas claves, su humor en el escenario, esos carrillos que se le inflaban como a una rana, o la extraña trompeta con un ángulo de cuarenta y cinco grados, hallazgo casual tras la caída de un instrumento.

Dizzy, su apodo, significa «excéntrico», y lo era cuando se trataba de dar espectáculo, además de ayudar a los músicos jóvenes, y hablar de música. Consideraba que un requisito obligado del jazz es que fuera bailable, y cumplía lo que han dicho de este género los especialistas, que es el sonido de la sorpresa.

En sendas entregas, «¡Bravo, Gillespie! (1)», y «¡Bravo, Gillespie! (y 2)», por Iván Tarrés.

Deportes

¿Cómo podéis llamar deporte al ajedrez? La frase es de Mijaíl Tal, campeón de Letonia a los diecisiete, y campeón absoluto de la URSS a los veintiuno. Ni Booby Fisher tuvo nada que hacer ante el «mago de Riga», como se le conocía. Genialidad en estado puro, capaz de aportar más imaginación a las partidas que ningún contrincante, acabó convertido en uno de los jugadores de ajedrez más legendarios. Su simpatía y sentido del humor le ganaron el cariño del público y la prensa, aunque su reinado solo duró meses. Su historia de bohemio enfermo, y esa imposibilidad de los ordenadores para calcular sus partidas, en dos entregas, por E. J. Rodríguez. «El fugaz resplandor de Mijaíl Tal (1)», y su segunda entrega

Se había pasado tanto en la fiesta de cumpleaños de su hijo que ni después de un termo de café logró salir al campo sin dar tumbos. Aguantándose las ganas de vomitar y el estómago revuelto fue trastabileando hasta marcar gol, y luego, tirándose al suelo, simuló un calambre, pidió el cambio, y se fue a su casa a dormir. Esta es la historia de «René Houseman y el gol del borracho». Por Fran Guillén.

Eros

Su explosión actual. que incluye desde jóvenes a mayores de cincuenta años, ha coincidido con el repliegue sexual de los varones japoneses, que prefieren masturbarse a follar porque así no tienen que conocer gente. Estas mujeres, por su modo de caracterizarse vistiéndose, obligan al varón a cuestionarse el rol tradicional de su masculinidad, convirtiéndolo en un ginófobo. Es «La rebelión de las lolitas y la involución sexual», por Carlo Fabretti.

Gastronomía

No es simplemente coger harina, leche, meter algo para que vaya dentro de la masa, unas sobras, freír y rebozar. Eso valdría para un plato que no fuese luz de mi vida, fuego de mis entrañas, pecado mío, alma mía, que al pronunciarlo la punta de la lengua no emprendiera un viaje de tres pasos paladar abajo hasta apoyarse, al tercero, en el borde de los dientes. Cro-que-ta. Con su receta, «Cómo hacer (existencialmente) unas croquetas». Por Marcos Pereda.

Filosofía

Nada le ha sido indiferente, por lo que ha acabado publicando sobre casi todo. Su carrera apenas tiene parangón en la historia de la prosa de ideas en lengua española. Ha sido uno de los principales renovadores del género del ensayo. Y publicado también novela, teatro, relato corto y monólogos. Es «Fernando Savater, humanismo impenitente (1): el sentimiento irónico de la vida» por José Antonio Vila Sánchez.

Ciencias

No fue un visionario científico que creara sus ideas de la nada, sino del exhaustivo conocimiento de la ciencia de su época. Por eso resulta un compañero idóneo cuando se trata de repasar los avances de su tiempo, teoría de la evolución, telegrafía, bombillas, y las espectaculares ferias internacionales. José Manuel Sánchez Ron nos lleva de viaje con el autor francés, revelando además detalles de su obra que nos ayudan a comprenderla mejor. «Viajes científicos con Julio Verne en la memoria (1)». Por José Manuel Sánchez Ron.

Dejó de ser verso de poetas para ser analizado científicamente, y gracias a eso ahora sabemos porqué nos hace falta la persona de la que nos enamoramos y porqué nos parte el corazón cuando rompemos. Un cóctel químico de hormonas con cuadro de dependencia, es la «Adicción al amor» por Andrés Delgado.

Cine y TV

Hubo un auge de películas eróticas relacionadas con el nazismo, primero en Israel en los años sesenta, cuando aún su población no tenía plena conciencia de lo ocurrido; luego  en Europa, con cintas que acaban siempre en escándalo. Una destacó sobre todas, una que en palabras de su propio autor quiso llegar a algo más profundo que el sexo como comportamiento típicamente fascista. «Viaje hasta ‘Salón Kitty’, la pajuela fascistoide de Tinto Brass». Por Álvaro Corazón Rural.

Titanes en el Ring era mucho más que un programa de televisión. Era un mundo. No hubo nada igual, ni antes ni después. Martín Karadagián, hijo de un matarife armenio y de una española ama de casa, y no solo se acabaría haciendo con el programa, participó en él con un personaje de luchador malo, luego bueno, pero siempre con un juego fronterizo entre la trampa y el juego limpio. «Martín el titán: no lo intenten en sus casas». Por Matías Bauso.

Murió el actor Juan Diego después de una carrera de éxito, y papeles inolvidables que dejan grabada a fuego en nuestra imaginación el rostro de esos personajes que nacieron destinados a no tenerlo. Los personajes de novela. Entre su amplia filmografía, fue el señorito en Los santos inocentes, Delibes; el marido de Yerma, Lorca; el abogado de Tirano Banderas, Valle-Inclán; el fraile contrario al sexo monárquico en El rey pasmado, Torrente Ballester; joven calavera en Jarrapellejos, Felipe Trigo; contable de una troupe de cómicos en El viaje a ninguna parte, Fernán Gómez; rico heredero en Laura, del cielo llega la noche (novela Laura, a la ciutat dels Sants), Miquel Llor. Muchos han sido actores, y otros han sido además la cara visible de la literatura. El motivo nos lo dejó dicho en una entrevista que le hicimos en 2017, con frases tan breves como descriptivas. «Cuando interpretas a un hijo de puta tienes que defender a muerte a ese hijo de puta», «prefiero hacer un buen secundario a una mierda de protagonista, aunque cobre más» o «yo soy un actor que está bien y tal, pero he tenido una suerte que te cagas.» Y nosotros de conocerte.


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